TLC:Y ahora, ¿Quién nos está defendiendo?

martes, 3 de abril de 2007

Escribe Pedro Francke


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Nunca pensé que diría esto, pero en relación al TLC, los peruanos estamos mucho mejor defendidos por los congresistas demócratas Charles Rangel y Sander Levin, que por Alan García y Meche Araoz.

Rangel y Levin han presentado hace pocos días la posición de la nueva mayoría demócrata en el Congreso norteamericano frente a los TLCs. En esta presentación, insisten en modificar el TLC suscrito por Toledo y Bush para que:

  1. Se revisen las reglas de propiedad intelectual, porque este TLC promueve que se eleven los precios de las medicinas debido a una exagerada protección de las grandes empresas farmacéuticas.
  2. Se establezca que los inversionistas extranjeros no deben tener mayores derechos que los nacionales, porque este TLC permite a los inversionistas extranjeros recurrir a tribunales internacionales para reclamar en caso que el estado aumente impuestos con el fin de distribuir mejor la riqueza de nuestros minerales, petróleo o pesca.
  3. Se protejan los derechos laborales fundamentales establecidos por la OIT, porque este TLC permite que el “libre comercio” empeore salarios, seguridad social y condiciones de trabajo, con empresarios dispuestos a ganar competitividad de la peor manera.
  4. Se garantice la protección del medio ambiente, porque este TLC promueve que se prosiga con la tala ilegal en nuestra amazonía y demás prácticas perjudiciales al medio ambiente.
  5. Se promueva el desarrollo mediante mayores programas de ayuda y ventajas preferenciales en el comercio, porque este TLC no toma en cuenta la pobreza prevaleciente en el Perú y las enormes ventajas que nos lleva EEUU para competir.

Los demócratas han planteado otro punto muy favorable a nuestro país: la prórroga inmediata del ATPDEA. Con esta prórroga, nuestras exportaciones mantienen todas las ventajas para entrar al mercado norteamericano, y no necesitamos el TLC para ello. Todo lo que nos dijeron acerca de que sin TLC nuestras exportaciones corrían riesgo y se perderían miles de empleos, se demuestran falsas por segunda vez.

Mientras tanto, Alan García, que criticó el TLC antes de las elecciones, tras los cambios en Estados Unidos no ha atinado a aprovechar las mejores condiciones para lograr puntos a nuestro favor. Lo que debería estar haciendo el gobierno es respaldar plenamente las posiciones demócratas y promover la prórroga del ATPDEA. Al mismo tiempo, debe insistir en que, como se tiene que renegociar el Tratado, se consideren puntos críticos para nosotros, como el agropecuario. ¿O nuevamente se trata simplemente de aceptar lo que venga, sin ninguna capacidad de proponer y negociar? Esta renegociación puede tomar su tiempo, permitiendo un amplio debate nacional al respecto, ya que el ATPDEA nos asegura que podemos seguir exportando a EE.UU. en condiciones ventajosas.


Alan García tiene la cancha servida para meter gol, con el equipo contrario abriéndonos el camino. Pero hasta ahora, en vez de avanzar, esconde la cabeza cual avestruz. Mucho peor, por cierto, Alfredo Ferrero y Meche Araoz, cerrados en defender que el mal TLC siga como está, sin importarles que ahora los propios Estados Unidos proponen que las medicinas no suban de precio y el estado mantenga la capacidad de regular las inversiones extranjeras.

¿Se complica la aprobación del TLC? Ya se había complicado con el triunfo demócrata. Lo importante es que se facilita seguir exportando a Estados Unidos y no tener que aceptar condiciones negativas para las mayorías. La oportunidad está servida. Si sólo el gobierno empezara a pensar con cabeza propia y dejar de seguir a la Confiep y a la Sociedad de Minería todo el tiempo.

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